A estas alturas creo que todos estamos sobradamente informados sobre este juego tan viralizado. Pokémon Go es un ídolo de masas, pero también se ha ganado detractores en la misma proporción y hoy he querido reflexionar un poco sobre ello, grumetes.
Como casi todo en el mundo, un uso incorrecto o abusivo de un elemento lo convierte en un pro-blema. Esto se puede aplicar a la gran mayoría de hobbies o aficiones, abusar de algo nunca es bueno. Pese a todo, hay ciertos sectores del entretenimiento que están más estigmatizados que otros, como es el caso de los videojuegos (a mí nunca me han dicho que tenía un problema por leer demasiado y, creedme, lo tenía).
Desde que existen los videojuegos la sociedad se ha empeñado en convertirlos en la oveja negra del entretenimiento, y la causa más común suele ser un pequeño sector de sus usuarios que lo utilizan de forma incorrecta. Los videojuegos se usan diariamente por millones de personas en todo el mundo, algunos con beneficios para la salud incluso, pero solo se hacen noticia los casos de su uso extremo o incluso se los acusa de ser la causa de algunos asesinatos. Lo mismo podríamos aplicar a películas o libros bélicos, pero eso no es noticia.
¿Cuál es el problema de Pokémon Go? Aunque parte del disgusto es entendible debido a la gran cantidad de publicaciones diarias que hay sobre él en las redes sociales, los que más odian este juego son los que se dejan llevar por las noticias de casos extremos. Por supuesto que hay personas que hacen un mal uso de la aplicación, pero también hay otras tantas que están haciendo un uso responsable de ella. De las millones de personas en el mundo que tienen instalado el juego podemos hablar de que han sido noticia un 5%, tirando muy hacia lo alto. ¿Es realmente tan malo?
Por otro lado tenemos las maravillosas noticias que empiezan a publicarse de hospitales que utilizan el juego como terapia para rehabilitación y el tratamiento del autismo, protectoras de animales que han conseguido un número récord de adopciones, personas con obesidad o depresión que se han lanzado a la calle por sí mismos y que caminan un promedio de 5 km al día... por no hablar de lo que yo misma estoy viendo en mi ciudad. Pese a vivir en un lugar muy pequeño, cada tarde veo grandes grupos de amigos reír y pasarlo bien, discutir estrategias, hacer ejercicio... ¿eso no cuenta?
Podemos sacarle un lado positivo y un lado negativo a todo en la vida, pero parece que aquello que no nos entusiasma y que al resto del mundo sí es mucho más fácil buscarle las cosquillas. "Si a mí no me gusta, a los demás tampoco debería". ¿Estás cansado de las publicaciones? También otra gente se cansa de las modas. Hubo quejas por los test y juegos de Facebook, por los spoilers de Juego de Tronos, por los tweets relacionados con fútbol o con las elecciones... surgen todo el tiempo. Si no te gusta, culpa a la persona que comparte esas publicaciones, no a la aplicación. Espero que esto no sea una revelación para nadie, pero la aplicación no crea y comparte contra la voluntad de todos esos post.
Lo último que he leído es que la policía hace llamamientos a la seguridad mientras se usa la aplicación, algo que dadas ciertas noticias no está demás, aunque ojalá no fuese necesario recordar que debes mantenerte con vida. Los comentarios eran contra la aplicación, pese a que no tiene culpa del mal uso que algunos usuarios le den.
En definitiva, ¿es Pokémon Go malo? En absoluto, malo es el uso que un mínimo porcentaje de los usuarios le está dando. Los insultos en redes y gritos por la calle a los jugadores me parecen del todo innecesarios ya que yo encuentro muchos más aspectos positivos que negativos.
Pero como esto es 2016, alguien podría sentirse ofendido por esta publicación (por favor, no). Recuerdo nuevamente que se trata solo de mi opinión, no voy a cambiar el mundo con esta publicación.
♥
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