¡Ya lo sé! Ya no son divas, son superestrellas. Pero era tan cómodo llamarlas divas y saber perfectamente que hablabas de la división femenina...
Hola, chiquitines. Hace algún tiempo (seguramente más del que soy consciente) hice un pequeño ranking con mis luchadoras favoritas. Hoy le he echado un vistazo y la verdad es que no me ha gustado nada. Y no solo porque el roster ya no tiene nada que ver con el actual, es que metí algunas que no sé qué demonios hacen ahí.
¡Aquí vamos!
AJ Lee
Que haya ahora mismo una encuesta sobre luchadoras retiradas, preguntando quién querríamos ver de vuelta en octubre, y que AJ Lee siga siendo la más votada, no importa cuantos años pasen, es un motivo ya para aparecer en esta lista.
Ella solita consiguió que las divas fuesen tomadas en serio. Ella solita elevó el título de divas a algo más o menos decente (todo lo decente que puede ser algo que ha sido tocado por Jillian). Y a día de hoy siguen sin reconocerle oficialmente ninguno de estos hechos por ser mujer de quien es. Espero de verdad que vuelva en octubre, aunque sea una ocasión irrepetible, porque se merece ese reconocimiento.
Entre algunos de sus logros está el de haber sido la segunda campeona de divas con el reinado más largo. Perdió la primera posición de una manera un poco polémica, pero nadie le podrá ya quitar el segundo puesto.
Alexa Bliss
Ha llegado y lo ha ganado todo. Lleva tanto tiempo siendo campeona que no recuerdo nada de lo que ha pasado antes de ella. Aun tiene que mejorar, pero es buena luchadora, buena con el micro e inspira a sus fans. Tiene la conmovedora historia de haber sufrido anorexia dos veces en su vida, una enfermedad que estuvo a punto de acabar con su vida y que ha superado gracias al deporte y especialmente al wrestling. Y este tipo de cosas a mí me conmueven mucho.
El único problema que le veo es precisamente la cantidad de veces que gana. Una persona, por mucho que sea querida, tiene que perder de vez en cuando para mantener el interés sobre su personaje y las adversidades. Pero, especialmente cuando ganan con trampas, corren un riesgo tan grande de acabar siendo odiados...
Asuka
Es maravilloso ver que la WWE ha creado un personaje tan imponente, tan fuerte e invencible siendo esta mujer de origen asiático. No nos engañemos, esta empresa ha tenido un pasado que no tildaría exactamente de racista, pero sí que se le han brindado siempre menos oportunidades a los extranjeros. Asuka es por fin el cambio y menudo cambio. Sus combates en el Royal Rumble femenino 2018 y Wrestlemania XXXIV han sido espectaculares y da siempre la sensación de que con ella todo va a ser novedoso y muy difícil para sus contrincantes.
Es una de las pocas luchadoras que no ha perdido la esencia que la hacía brillar en NXT al pasar al roster principal, y es que están tan orgullosos de ella que hay verdadero miedo de estropear su personaje (y no me extraña. Yo, si fuese una guionista, tendría mucho cuidado).
Karma
Karma tuvo una presentación muy especial. Antes de poder verla luchar, la WWE lanzó una campaña de vídeos a modo de aviso de que algo grande se acercaba. En ellos, Karma amenazaba a todas aquellas luchadoras que típicamente se asocian con la muñeca Barbie. Todas las mujeres atractivas y de medidas perfectas estaban bajo su atenta mirada y podían ser atacadas en cualquier momento, sin importar lo que estuviese pasando en el ring en ese momento.
Desgraciadamente, su personaje era algo pasajero. No se podía mantener para siempre atacando a mujeres guapas porque sí, acabaría aburriendo al público. Tampoco se la aprovechó demasiado como luchadora, sus actuaciones eran más bien anecdóticas y no se la echó de menos cuando se fue. ¡Y aun así me ha calado!
Lana
Esto tiene su pero, obviamente. Lana es un personaje que ha cambiado totalmente (está, desgraciadamente, irreconocible). Debutó como la mánager de su marido, una mujer de origen ruso despiadada y con mucha mano para ayudar a su cliente a conseguir ganar los combates. Cuando decía crush, Rusev desataba el infierno en el ring.
Era un personaje carismático que ayudó a Rusev a subir rápidamente y crear una pareja de villanos que parecía muy difícil batir. El propio personaje de Lana se granjeó muchos fans que la llamaban a gritos cada vez que a Rusev se le ocurría salir solo. Pero ni todo el amor del mundo bastó para que le perdonaran lo mala que es como luchadora.
A alguien en la WWE se le ocurrió la fantástica idea de que Lana podía hacer algo más que acompañar a su marido y lucir escote, un error a todas luces. Lana es una luchadora horrorosa, pese a lo entrenada que está y su pasado como atleta en diferentes ramas.
Pese a todo, mantengo la esperanza de que o bien mejore como luchadora o bien la devuelvan al territorio de mánager.
Lita
Explicar esto es un poco obvio. Antes de las divas estaba Lita, una mujer que le dio a la división femenina algunos de sus mejores momentos antes de la revolución actual. Pese a que también ha tenido momentos terriblemente bochornosos y muy sexistas (no creo que haya un solo fan del wrestling que sea capaz de olvidar la escenita de sexo con Edge en medio del maldito ring).
Lita fue la primera en muchas cosas. La primera en darlo todo y acabar sangrando en un combate femenino. La primera en ser el main event. Y la inspiración de casi todas las luchadoras actuales. Le debemos lo que tenemos hoy de muchas formas diferentes.
Hoy día sigue ligada a la WWE. Apareció en el Royal Rumble femenino y suele ser comentarista de los grandes eventos de pago.
Maryse
(Ahora mismo estoy pensando que en la anterior lista no estaba Maryse y no sé qué demonios estaba pensando. No merezco menos que la muerte)
Puedo entender que haya a quien no le gustase Maryse como luchadora, pero todos coincidimos en que le da mucha vida a las historias. Si metes a Maryse de por medio, tienes salseo asegurado (con decir que odiaba a su marido y gracias a ella me parece entretenido y hasta majo).
Actualmente trabaja con The Miz, apoyándole. No es exactamente una mánager y tampoco es luchadora. Vive en un limbo extraño, pero odiaré con toda mi alma el momento en que abandone la empresa.
Acaba de estrenar un reality show muy de comedia con su marido The Miz, el cual recomiendo encarecidamente a todos los fans. Se llama Miz and Mrs y tenéis las risas aseguradas.
Nikki Bella
El reinado de divas más largo de la historia. Ha estado en todos los grandes eventos femeninos de los últimos tiempos. Protagonista indiscutible del reality show Total Divas y su spin off, Total Bellas.
Nikki es amada y odiada a partes iguales, ambas con demasiado fervor. Como luchadora ha mejorado mucho y ha demostrado que le importa la empresa tras una lucha muy intensa con una lesión de cuello que podría haber acabado no solo con su carrera, también con su vida normal (a punto estuvo de quedar paralítica).
Al contrario que su hermana gemela, se come la pantalla cuando sale. Y, si bien no siempre se la vitorea como le gustaría, las reacciones que consigue suelen encender al público. Abrió la puerta para toda una nueva generación de luchadoras y, aceptémoslo, es una futura Hall of famer. Sus combates contra Charlotte figuran entre los mejores de la historia y os los recomiendo encarecidamente.
Paige
Al igual que Karma o Lana, Paige es un personaje que no ha cambiado lo suficiente para mantenerse entretenida y los pocos cambios que ha hecho han sido a peor. No creo que llegue nunca a ser odiada, pero su actual puesto de mánager le está haciendo un flaco favor.
Fue la primera campeona de NXT y, junto a AJ Lee, cambió radicalmente cómo funcionaba la división femenina. Tenía un personaje inestable, de loca, que resultaba intrigante y siempre daba sorpresas. La supieron llevar muy bien durante un tiempo, pero acabó siendo reemplazada por caras nuevas y, finalmente, una lesión la ha apartado del ring.
Sus apariciones en Total Divas son memorables. Como luchadora ya tenía una personalidad muy entretenida, pero en persona es incluso mejor.
Stephanie McMahon
Como luchadora tampoco es nada del otro mundo, al igual que Shane McMahon. Ahí es donde se nota mucho que papaíto nos deja hacer lo que queramos mientras no suponga la bancarrota. Ahora bien, como personaje malvado es de lo mejorcito. Debe ser cosa de familia, porque Vince McMahon como villano lo tiene muy difícil para ser superado por alguien.
Lo bueno de su personaje es que esta familia, a pesar de ser terriblemente poderosa y absurdamente rica, saben perder. Y saben que a la gente les encanta verles perder y tener una rabieta de las buenas en el ring. Te llevan al límite y, cuando por fin los ves caerse con todo el equipo, llega un clímax maravilloso. A Stephanie la hemos visto hasta metida en una piscina de barro llorando, algo por lo que habría pagado en WWE Network solo para ponerlo en bucle.
Y como hay muchas posibilidades de que acabe siendo la heredera de la empresa, pues vamos a hacerle un poco la pelota.
Trish Stratus
Como Lita, mencionarla es a la vez obligatorio e innecesariamente obvio. Fue también la primera en protagonizar un main event (el último combate de un programa y, por lo tanto, el principal y más importante).
Con ella tengo sentimientos encontrados porque, si bien es cierto que era muy buena y que nos dio momentos grandísimos, también abrió la puerta para toda una nueva generación que acabó siendo llamada divas y se convirtieron en accesorios para los hombres. A ella la contrataron por su atractivo y, con el paso del tiempo y mucho entrenamiento, pasó a ser una gran luchadora. Y como la fórmula les había salido bien, siguieron con la misma técnica hasta que ser buena luchadora dejó de importar durante un tiempo demasiado largo.
Con todo, Trish ha hecho historia y no he encontrado a nadie que no le gustase cómo luchaba. Por ella me compraría un sombrero de vaquera rosa.
Vicky Guerrero
Cuando pronuncio la frase "Echo de menos a Vicky Guerrero", suelo ganarme miradas incrédulas. Pero, al igual que Stephanie, Vicky era una villana de película. Como mánager ha tenido momentos muy buenos y es una experta en dejarse en ridículo para deleite del público. Ha tenido tantas bodas absurdas, ha orquestado tantos combates maravillosos (como en Wrestlemania XXX) y lanzó a Stephanie a la piscina de barro, por favor. Ya solo por eso se merece estar en todas las listas.
Aunque cada vez que escucho un "Excuse me" me entren escalofríos, Vicky siempre será una de las mejores (y estuvo casada con Eddie Guerrero, eso tiene que contar para algo).
Hay otras estrellas como Peyton o Liv Morgan que no me he atrevido a poner en esta lista porque acaban de llegar, no hemos visto nada y puede cambiar mi opinión muy fácilmente. También he tomado la decisión de no hacer una cuenta atrás porque realmente es cada vez más difícil ordenarlas. Antes las mujeres se contaban con los dedos de una mano y ahora hay tantas estrellas que resulta difícil.
¡Y aquí acaba esta lista! Muchas gracias por leerme y nos vemos en la siguiente entrada.
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